Y de pronto, sucedió… En medio de la pandemia comenzamos a recibir pedidos, aunque únicamente podremos enviarlos desde que haya posibilidad de hacerlo y finalice el confinamiento estricto. Amigos y amigas, gente anónima desde sus casas confesaba no importarle y hacerlo para apoyarnos, como una manera de darnos aliento ante las evidentes dificultades que sufrimos ante este «parón». A pesar de todo, diariamente seguimos trabajando para compartir contigo lo maravilloso, la anomalía y la cultura de las grandes minorías, la historia secreta de tu tiempo. Porque nuestra principal arma es contar con una comunidad que nos cuida cuando acecha el peligro. Desde el aislamiento sentimos vuestra solidaridad. Nuestra «casa» son muchas casas. Por todo ello, infinitas gracias, como infinito es nuestro deseo de seguir a tu lado conspirando, publicando joyas, amando los libros, rescatando la memoria para impugnar la desmemoria, mimando la manera en que hacemos las cosas, llevándote cada mañana al asombro y editando lo que parecía imposible que se editase en nuestro país. Ahora más que nunca los agentes secretos están por todas partes.

Así que quienes durante el estado de alarma nos hagáis un pedido a través de nuestra tienda online, serán obsequiados con este fetiche tan codiciado hoy (un rollo de papel higiénico personalizado, con diseño del gran Mario Rivière, y recordatorio de la estupidez humana) para «usar en la próxima pandemia». Te llegará a tu casa, junto a tu pedido, tan pronto como sea posible.

Estamos escribiendo el Gran Libro del Siglo XXI. Fin del comunicado.